viernes, 28 de noviembre de 2014

“La música es un medio para la expresión del alma”

Urko Menaia/ Cantautor 
                                                                                                                                Lucas Ibar 
Urko Menaia con su voz melancólica, tenue, acompañado de su guitarra clásica, recrea con sus  versos en euskera el ambiente idílico del otoño donostiarra, describiendo paisajes surrealistas que logran encandilar al público con sus letras. Entre acorde y estribillo consiguió cumplir su sueño, el de convertir sus melodías en su medio de vida, porque  comprendió que la música es una expresión del Alma.
P: ¿Urko Menaia, cómo fueron tus primeros pasos como cantautor?
R: Como cantautor, ya sabes;  con los primeros acordes vienen las primeras ideas. En mi caso empecé a  probar con la guitarra  a los 14 años  siguiendo los pasos de mi abuela que tocaba mucho en casa por aquel entonces. Ya antes tocaba algo un teclado sintetizador que había por allí, pero las primeras canciones llegaron con la guitarra. Compuse algunos temas bastante surrealistas y con los acordes que iba aprendiendo.
P: ¿Dónde fue tu primer concierto?
R: En la facultad de Bellas Artes de la Universidad del País Vasco en el año 2009. Fue un profesor, curiosamente de dibujo, quien nos propuso tres temas:  la torre de babel, el laberinto y la invasión de Troya. Debíamos ceñirnos a los temas, pero los medios eran libres y yo decidí componer y cantar subido al escenario donde solían posar los modelos desnudos. Dos compañeros de clase me acompañaron con percusión.
P: A los 14 años comenzaste a  componer  canciones. ¿Algún tema de  esa  época la sigues cantando en la actualidad?
R: Como ya he dicho antes eran canciones bastante surrealistas, con acordes disonantes, difíciles para un público  no preparado. Pero sí, alguna que otra vez, todavía las toco en directo. Generalmente sin preverlo. Es una bala que guardo en la recámara.
P: Las melodías de tu música mezclan sonidos country, tango y música vasca. ¿Cómo definirías tu estilo musical?
Siempre es difícil definirse a uno mismo, pero creo que se puede decir que es música folk que se nutre de dos corrientes: la tradición más rural influenciado por Mikel Laboa y la influencia de canciones más “ciudadanas” por así decirlo de Xabier Lete. De todas maneras  no creo que yo sea especial en esto.
P: ¿Que intentas transmitir en tus letras de tu Disco Urko Menaia?
R: Se intenta transmitir emociones y se intenta sobre todo que la música, letra,e interpretación sean una única unidad.Creo que mis canciones son sugerentes  pinceladas poéticas y no asuntos concretos. Aunque en muchas ocasiones se parta de un hecho específico y tiendo a la abstracción. Me gusta mucho la poesía oriental y esas pequeñas acuarelas donde se recrea una atmósfera un estado de ánimo.
P: ¿Porque has decidido cantar en Euskera y no en Castellano que  tiene más difusión?
R: Las primeras canciones que escuché en casa fueron en Euskera pero también cantábamos en Español. Digamos que crecí en un ambiente bilingüe; pero a la hora de componer me siento más cómodo en Euskera. La plasticidad de nuestra lengua es difícilmente superable por un idioma romance. El hecho de ser una lengua ancestral (la más antigua de Europa), el haber sobrevivido durante tantos miles de años,  dice mucho sobre su extraordinaria capacidad de evolución, de libertad... Y esto a la hora de escribir es una ventaja.
P: ¿Te sientes limitado al cantar en Euskera para un público más específico?
R: Tristemente existe en España e incluso dentro del territorio vasco un sector mentalmente limitado y condicionado por un prejuicio político imperialista. Y tristemente no son pocos. Esta gente no tiene ningún inconveniente en escuchar sin entender otros idiomas y ni siquiera se lo plantea.  Es música y ya está. Pero si es en Euskera, se les enciende el cartelito de “no entiendo”. De todas maneras, en favor de la población, debo decir que creo que por lo menos la mitad del público que viene a escucharme no es vasco parlante. Y hoy en día hay grupos que están abriendo el camino más allá de nuestras fronteras culturales. Por ejemplo Berri Txarrak llena salas en Madrid.
P: ¿Qué diferencias hay entre tu canción  de tu LP Ametsak eta oroitzapenak y el de tu primer disco Urko Menaia?
R: En el primer LP incluía canciones de la tradición y versiones de otros autores y los acompañamientos eran básicamente de guitarra. En Ametsak eta oroitzapenak toda la composición musical es mía y la mayor parte de los textos,  aunque también hay algunos poemas musicados. En éste último, en los acompañamientos, además de la guitarra  aparecen el piano y el violonchelo.
P: ¿Cómo ha sido tu experiencia de la presentación de tu disco en diferentes “Euskal Etxeak”  en Norte América y en el extranjero?
R: Sí. Fue realmente alucinante poder tocar para las comunidades vascas de Norte América. La asociación de “Euskal Etxeak” de Norteamérica me invitó para realizar una gira, durante un mes, por cinco estados repartidos por toda su geografía y creo que esto ha influido mucho en mis últimas composiciones. Después viajé a Grecia para permanecer durante cuatro meses en un pequeño pueblo del norte, y di otros tantos conciertos organizados por una editorial. En Chequia actué para los alumnos de Euskera de la Universidad de Brno.
P: Comienzas a darte a conocer como músico callejero en el Boulevard de San Sebastián.  ¿Qué se siente pasar de tocar en la calle para un público desconocido  a los escenarios  principales de la Semana Grande de San Sebastián o Fiestas de San Fermines?
R: Bueno,en realidad tocar en la calle es tocar para un público muy grande. En Semana Grande y en San Fermín toqué acompañado de músicos de gran nivel y cuando esto funciona lo que se siente es un gran apoyo y la sensación de avanzar con la fuerza de un mar. Las buenas condiciones técnicas en estos conciertos son también un gran apoyo.
P: ¿Cómo es la vida de un músico callejero? ¿Qué inconvenientes y ventajas tiene tocar en la vía pública?.
R: Bueno los inconvenientes pueden ser los mismos que para cualquier trabajador al aire libre. Entre las ventajas está la de poder darte a conocer a gente de todo el mundo. De hecho fue aquí donde el presidente de N.A.B.O. (North American Basque Organizations) me conoció.
P: ¿Prefieres los escenarios grandes o más pequeños? y ¿Por qué?
R: Cuando pueda actuar en el Kursal te lo diré.(riéndose).
P: ¿Como ves el panorama cultural de Euskal Herria? ¿Crees que el  Gobierno Vasco debería apoyar más a los músicos y artistas vascos para difundir su lengua?
 R: Claro. Pero también el estado, si pretende que la unión sea vista como democrática y no como invasora, debería apoyar nuestra cultura en vez de atacarla. Por eso aquí sabemos muy bien qué  es la autogestión y hemos sido en muchos casos un referente a nivel europeo.
P: ¿ A la hora de componer en que te inspiras?
R: Difícil respuesta. No sé, a veces creo que es la propia guitarra la que lo hace por mí. También en lo que leas o escuches que realmente haya dejado huella en tu interior. Son muchos caminos creo yo.  Algunas ideas quedan apartadas durante un tiempo, luego se retoman... y en un momento dado pueden encajar unas con otras.
P: ¿Qué le aconsejarías a un joven que comience sus andaduras en la música?
R: Que se  pregunte si lo hace desde dentro. En la sociedad capitalista en la que vivimos se puede seguir adelante si uno se sabe vender a pesar de estar vacío por dentro y quizás hasta  se pueda tener la suerte de ascender en la industria.
P: ¿ Qué es la música para ti?
R: La música es un medio para la expresión del alma. Y como tal, es necesario que el receptor tenga  una predisposición a ser seducido espiritualmente por ella. Por culpa del pensamiento comercial, de las tendencias dirigidas, de la difusión indiscriminada, hay productos  a  los que duele llamar música aunque físicamente lo sea y es difícil escapar a su escucha. No creo que la música sea exclusiva de los humanos y si se anda con el corazón abierto, se puede encontrar más  musicalidad en la naturaleza que en  estos fenómenos  comerciales que esperemos  sean pasajeros. Lo verdadero prevalecerá. O eso quiero pensar.

                                                                                                    

No hay comentarios:

Publicar un comentario